27.11.04

Capitales del invierno

MADRID Y BARCELONA aprovechan estos meses de frío para recibir con calidez a cualquiera que desee disfrutar de sus calles y renovar su capacidad de asombro

Noviembre recorre la ciudad en un desfile de abrigos y bufandas, y el andar de unos pasos apurados marca el ritmo en la cadencia del invierno. Gélido en la meseta curtida, más templado y húmedo junto al Mediterráneo que todo lo dulcifica. El frío desciende desde el rostro hasta los pies, como la luz de la tarde, que se desliza con suavidad por la fachada de los edificios. Luz que se escurre en los balcones y llega a las aceras, hasta posarse en los parabrisas empañados de los coches. El sol se refleja en las ventanas y proyecta los matices de un otoño que se va.

El frío de estas fechas ha sido, desde siempre, el mejor anfitrión. Invita a quedarse en casa y, por supuesto, a recibir visitas. De alguna manera, el turismo urbano es la síntesis de esa tradición, porque recoge la calidez de la acogida. Sin prisa, sin pausa, el clima desnuda a los árboles mientras viste el aire de Madrid y Barcelona. Ambas capitales viajan con destino a la última estación del año ofreciendo sus bondades, seduciendo a los turistas. Sugiriéndoles hacer una parada.

MADRID
La Plaza Mayor fue inaugurada en el año 1620. Su planta rectangular fue escenario y testigo de diferentes acontecimientos públicos, desde corridas de toros hasta juicios de la Inquisición, pasando por fiestas, bailes y obras de teatro. El edificio más llamativo del lugar es la Casa de la Panadería. Con una fachada adornada por frescos, se sitúa frente a la Casa de la Carnicería y, juntas, evidencian la historia de un recinto que hasta el siglo pasado ejerció como mercado.

La estatua ecuestre de Felipe III se levanta en el centro de la explanada y es un eje de bronce para iniciar el recorrido hacia otras plazas cercanas. Las hay, y muchas. Hacia el este, la Plaza de la Provincia luce el Palacio de Santa Cruz, que data del siglo XV. Hacia el oeste, la Plaza de San Miguel ofrece su mercado y, por la Calle Mayor, se accede a la Plaza de la Villa, que custodia la casa consistorial.

No muy lejos se aprecia la Casa de Cisneros y la Torre de los Lujanes, una edificación de estilo mudéjar con más de quinientos años de antigüedad. Otra plaza, la del Conde de Miranda. A su alrededor, las callejuelas estrechas enseñan un Madrid medieval, con palacios y conventos, como el de Las Carboneras, construido a principios de 1600. La Basílica de San Miguel, el Palacio Arzobispal y la Iglesia de San Pedro el Viejo guían el camino hasta la Plaza de la Paja, donde está la Capilla del Obispo, el único templo gótico de la ciudad. Le siguen la Plaza de San Andrés, la del Humilladero y la de Puerta Cerrada. La calle de Cuchilleros, repleta de tabernas y mesones, desemboca en un arco de igual nombre que da acceso al punto de partida: la Plaza Mayor.

Otro lugar de encuentro con Madrid es la Plaza de Cibeles, porque allí se dan cita los monumentos más significativos de la capital. El Cuartel General del Ejército, construido en 1769, mira al Palacio de Linares a través de sus jardines. Y el estilo neobarroco de este último, que ahora alberga a la Casa de América, contrasta con el toque historicista del Palacio de las Comunicaciones. A su lado, el Museo Naval cede el paso al Banco de España, edificado en 1891.

La calle de Alcalá conduce a una de las puertas más famosas del mundo. Tiene 226 años, es obra de Francisco Sabatini y está situada en la Plaza de la Independencia: la Puerta de Alcalá se alza sobre Madrid recordando que, en su momento, fue la entrada de la ciudad. A pocos pasos está el Museo de Artes Decorativas , desde el que se pueden ver el Museo del Ejército y la Real Academia de la Lengua. Cercano, el Parque del Retiro ofrece paseo y pausa. Es el vestigio viviente de una época de oro, el testigo de lo que alguna vez fueron los jardines y mansiones construidos para uso real en 1632. En su interior se encuentran el Palacio de Cristal y el de Velázquez, ambos destinados a albergar exposiciones.

El Palacio de Villahermosa se convirtió en el Museo Thyssen-Bornemiza en el año 1992. Es una edificación de estilo neoclásico, fue construida en el siglo XVII y, actualmente, reúne una muestra impactante de arte occidental. Desde allí, por la Carrera de San Jerónimo, se llega hasta el Palacio del Congreso, sede del Parlamento español, en la Plaza de Las Cortes. En esa zona se encuentra
también la Casa-Museo Lope de Vega, próxima al lugar donde vivieron Cervantes, Góngora y Quevedo.

La Iglesia y Convento de las Trinitarias, ubicado en la calle Lope de Vega, mira de cerca al Paseo del Prado y la Fuente de Neptuno. Y el Hotel Ritz, erigido en 1910, es una buena parada antes de dirigirse al Museo del Prado, el edificio que atesora la colección más importante de pintura española hasta el siglo XIX. Murillo, Rivera, Goya y Velázquez comparten espacio con obras de arte flamenco e italiano. Desde allí se accede al Jardín Botánico pero, en la calle Santa Isabel, otro edificio capta todas las miradas: el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. En él se encuentran todas las colecciones de arte contemporáneo español, incluido el ‘Guernica’ de Picasso.

BARCELONA
Del Barrio Gótico al Forum Barcelona es, en parte, un sueño curioso de Antoni Gaudí. Una ciudad de formas imposibles y colores fragmentados. Un proyecto dinámico que aún está sin terminar. Y la Sagrada Familia, su obra más conocida, es un claro exponente del ingenio inacabado. Gaudí le dedicó toda su vida e, incluso, vivió dentro del recinto para seguir su construcción más de cerca. El templo comenzó a erigirse en 1882 siguiendo un estilo neogótico, y, en él, el artista invirtió todo su saber arquitectónico y toda su ambición. Previó la construcción de doce campanarios –uno por cada apóstol–, cuatro más para los evangelistas, uno dedicado a la Virgen María y, el más importante, de 170 metros de altura, coronado con una cruz de cuatro brazos como símbolo de Jesucristo.

Para formas imposibles, La Pedrera. Gaudí lo construyó entre 1906 y 1910 por un encargo de la familia Milá, y, desde entonces, se ha convertido en uno de los más imaginativos en la historia de la arquitectura. Su fachada es una superficie ondulante de piedra sin líneas rectas, donde el hierro forjado de los balcones emula formas vegetales. El terrado es la cumbre de su fantasía. Las chimeneas, con formas que recuerdan guerreros, custodian desde lo alto a todo el edificio, reconcido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad en el año 1984.

Los colores fragmentados están en el Parque Güell, que se construyó entre los años 1900 y 1914. Originalmente, el lugar fue ideado como una urbanización aristocrática con residencias unifamiliares. Sin embargo, el proyecto fracasó y, desde 1923, funciona como un parque público que está situado en la parte alta de Barcelona. 86 columnas dóricas sostienen la plaza del parque, que forma un bellísimo balcón desde el cual se pueden contemplar el mar y la ciudad. Un banco ondulado recubierto de trencadís es el límite de la plaza. Y el de la imaginación.

El corazón del Barrio Gótico late en la plaza de Sant Jaume, cuyo origen se remonta a los tiempos de la dominación romana. Esta plaza se ubica en el lugar donde, antiguamente, se levantaba el foro de la ciudad y, en la actualidad, discurre entre los dos edificios más importantes de la Administración: la Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiento de Barcelona. El Palacio de la Generalitat, con su fachada renacentista y gótica, custodia el Patio de los Naranjos; y el del Ayuntamiento recubre el Salón de las Crónicas con su exterior neoclásico y su patio gótico.

Otro punto central del barrio se encuentra en la Plaza del Rei. Allí confluyen la Iglesia de Santa Ágata con el Palacio Real Mayor, un inmueble que, en su origen, fue la residencia de los Condes de Barcelona. En él destacan el salón de Tinell y las ventanas, del siglo XI. También en esta plaza se encuentra el Palacio del Archivo de la Corona de Aragón, una obra renacentista que data del siglo XVI. La Catedral, construida entre 1298 y 1450 e inaugurada en 1773, se erige a unos pasos de allí e invita a viajar en el tiempo.

Fin de la Historia. El Forum abre un nuevo capítulo en la capital del Mare Nostrum, precisamente a sus orillas. Allí donde termina la Diagonal y empieza el mar de los fenicios, la ciudad –ahora BCN– ha enclavado su nuevo tributo a la postmodernidad del siglo XXI, la sede del foro de las culturas que, como cualquier cosa en Barcelona, no importa que haya terminado porque sigue atrayendo al público.

Del festival queda un legado intenso y efervescente: el CaixaForum, que aprovecha una fábrica modernista diseñada por Puig i Cadafalch para organizar hasta tres exposiciones simultáneas. O las obras de la nueva Fira de Barcelona, que en 2007 pasará a ser Gran Vía M2. Y, en medio, los restaurantes del último lugar conquistado por la capital y sus travesías conforman un nuevo itinerario de ocio y cultura arquitectónica, que se suma a la Villa Olímpica. Preside el Edificio Forum, destinado a impactar al turista de la mano de los suizos Herzog y De Meuron. Difícil reto
en una ciudad que posee cinco inmuebles declarados Patrimonio de la Humanidad.

25.11.04

Bilbao se vestirá de fucsia en navidades

Tiendas, edificios, calles y plazas modificarán su aspecto con el objetivo de atraer visitantes e impulsar el comercio. El proyecto conjugará luz y color para «dar ambiente»

Navidad, fucsia Navidad. Como todos los años, Bilbao recibirá diciembre con aires de invierno, de fiesta y de reunión. Pero, esta vez, el tono será distinto y, para la ocasión, lucirá un vestido nuevo. Un traje largo como la villa, ancho como sus calles. Y fucsia. «Rosa neón», como anunció ayer Ricardo Barkala, el concejal delegado del Área de Empleo y Promoción Económica del Ayuntamiento.

Durante las próximas navidades, el arte y la moda pasearán de la mano por Bilbao. La ciudad tendrá un aspecto diferente gracias a unos juegos de luces y color que serán los protagonistas en edificios, calles, escaparates y plazas. La iniciativa, puesta en marcha por el Ayuntamiento y la asociación Bilbao Dendak, consiste en una muestra artística de grandes dimensiones diseñada por Ana Laura Aláez. Al mismo tiempo, se enmarca dentro de un proyecto económico que busca promocionar la imagen, el turismo y el comercio de la villa.

Se denomina ‘She’s in fashion’ (‘Ella está de moda’) y tiene «un doble objetivo», según explicó Barkala. Por un lado, pretende «crear un ambiente navideño e impulsar la vida social y comercial de la ciudad para el público bilbaíno». Por otro, intenta «atraer visitantes y generar nuevos nichos de actividad económica», señaló. En este sentido, el concejal adelantó que «más de cien comercios» se plegarán a la propuesta.

La muestra forma parte del proyecto Moda Bilbao Fashion y es la primera de «otras tres» que se
desarrollarán a lo largo del año que viene. Pretende «llevar la moda a la calle y el arte a los escaparates» y, para ello, el hilo conductor será el color rosa neón. Hoteles, oficinas, bancos, restaurantes y comercios. Luces y figuras de este tono pintarán algunos puntos clave de la ciudad a partir del 13 de diciembre.

TEATRO ARRIAGA - Curvas y sensualidad
Una boca gigante y un beso de luz. El Teatro Arriaga lucirá en su fachada una escultura flotante de diez metros de largo y seis de altura. La instalación, en forma de boca, estará coloreada de fucsia y dispondrá de iluminación interior. Asimismo, para potenciar los efectos de la actuación, se realizarán proyecciones de color sobre el edificio. Según la diseñadora, esta gama de colores «se contrapone a la abundancia de grises de Bilbao», mientras que «los componentes orgánicos y sensuales contrastan con las formas rectas y los metales» característicos de la ciudad.
PLAZA MOYUA - Robótica y humanidad
Aunque la imagen distintiva del proyecto es la silueta de una mujer que luce el lema «She’s in fashion», la ‘performance’ de la Plaza Moyua tendrá forma de robot. La figura, de cuatro metros de altura, estará construida con metacrilato e iluminada desde adentro con neones rosas. Para Ana Laura Aláez, esta es una manera de «resolver la figura humana en geometría». La artista considera que «el robot enlaza la moda con la idea del juguete» y que, de esta manera, «el arte se concibe como un juego al alcance de todos». Efectivamente, de todos quienes observen la propuesta en una plaza que, además, estará iluminada con focos del mismo tono.


EDIFICIOS Y MONUMENTOS - Baños de luz
Algo similar sucederá en otras edificaciones y lugares de la ciudad. El edificio del Ayuntamiento, el árbol de Navidad de la Plaza Indautxu y el monumento a Don Diego López de Haro, en la Plaza Circular, también tendrán su baño de luz rosa. Como complemento, 'She’s in fashion’ prevé proyecciones en espacios relevantes que se llevarán a cabo durante la noche, con cadencias programadas.


ESCAPARATES - El arte de vender
El proyecto cuenta, a su vez, con un equipo de interioristas y escaparatistas. Ellos serán los encargados de diseñar diferentes intervenciones artísticas en escaparates y comercios, siempre siguiendo las indicaciones marcadas por la creadora. Los elementos son cuatro: una silueta de mujer, un contorno de robot, unos labios sensuales y, por supuesto, el color fucsia como nexo. Basándose en estas pautas, estos profesionales pondrán en forma los escaparates y las fachadas de los comercios, así como algunas instituciones.

Más de cien comercios se suman al proyecto

Impacto. Más que nunca, «Bilbao es una ciudad viva». El maquillaje, la sombra, el rubor y la iluminación que tendrá en diciembre dan fe de esa vitalidad. Son artilugios de belleza y, por supuesto, seducen. Sobre todo a los comerciantes.

Más de cien tiendas y negocios de la villa se han sumado a la iniciativa del Ayuntamiento y pondrán a tono sus escaparates, decorándolos con las figuras y el color propuesto por Ana Laura Aláez, la diseñadora responsable del proyecto.

El concejal del Área de Empleo y Promoción Económica del Ayuntamiento, Ricardo Barkala, no especificó qué tiendas se han adherido a la propuesta. No obstante, adelantó que las mismas están ubicadas dentro de un recorrido que se articula en torno al centro de la ciudad. Desde el Casco Viejo hasta la Plaza Indautxu, pasando por todo el Ensanche. Éste es el trazado de un circuito que vestirá de rosa neón durante las próximas navidades. Sin embargo, «no tiene por qué ser el único», manifestó Barkala, quien aseguró que las tiendas de otros barrios también podrán sumarse al evento. En todos comercios participantes se venderán, además, camisetas y bolsos que lucen la imagen del proyecto. La recaudación que se obtenga de las mismas se destinará íntegramente a obras de caridad.

21.11.04

El puerto de las lágrimas

Decenas de personas se reunieron en en el muelle de Santoña para esperar el rescate de los marineros desaparecidos en el naufragio

Miraban a la mar cargados de preguntas y el horizonte les devolvía un silencio por respuesta. Un eco sordo, tan vacío como el puerto de Santoña. A las seis de la mañana, ya todos los barcos se habían ido. Llevaban sus banderas a media asta y la firme determinación de ayudar en lo que hiciera falta. Pero atrás, en el muelle, madres, hijos, esposas y vecinos no podían evitar mirar al mar. Desconcertados, todavía incrédulos, también se miraban entre sí con ojos de trasnoche. Más allá, desolación. Más acá, tristeza. Y en todas partes, dolor. El puerto era un gran pozo de agua donde estaba anclado el corazón del pueblo.

A las diez de la mañana, las cosas seguían igual: dos muertos en tierra y tres marineros en el mar. Entre ellos, Elías José Gallego, el patrón del pesquero. «Dicen que está atrapado en las redes», comentaba alguien al pasar. «Por eso demoran tanto en sacarlo del barco», respondía un vecino. «Es que no pueden darlo vuelta». «Sí, eso oí». Las hipótesis salían a flote, una detrás de la otra, aún cuando supieran de sobra que la tragedia no se puede razonar.

Pilar es la hermana de Elías. Como todos, esperaba resignada al borde de un muelle que, en cuestión de horas, se había convertido en el filo de un abismo. Ni millas, ni razones, ni valores adoptados por la náutica: el único nudo válido era el que tenía instalado en la garganta. El que la hacía llorar. «Mi hermano era una bella persona. Toda su vida la dedicó al mar. Cuando nos encontrábamos por aquí siempre me invitaba a comer algo. En este momento, sólo quiero que lo saquen, que esté aquí», decía con una expresión desencajada. «Nos llevábamos muy bien y, ahora, sólo me queda eso».

En las ventanas de los tinglados, una decena de banderas con crespones negros recordaba la desgracia. Entre comercios cerrados y un pueblo amarrado al puerto, las hojas de los periódicos eran leídas con frenesí. Pero las noticias ya estaban viejas y los rostros congestionados marcaban el paso de un tiempo que iba demasiado lento. «Tardan mucho». Esa frase signó la mañana.
Una espera de angustia
Los familiares seguían a la espera en una sala de la cofradía junto a la alcaldesa, que además de ser la responsable municipal, vivía el dolor en carne propia. «Aquí estoy, dando la cara», decía. Uno de los tripulantes del barco era su primo. A unos pasos de ahí, la esposa de Elías miraba por la ventana hacia un mar que, además de llevarse a su marido, también le arrebató a su hermano. Abajo, en la cafetería, Celestino Sañudo seguía jurando que no volvería a navegar. El resto del pueblo continuaba acercándose al muelle y preguntando si había alguna novedad. Pesadumbre. Voz baja. Dolor. Santoña estaba de luto.

Lejos del tumulto, una silueta encorvada recortaba ese horizonte plano. Carmen estaba sola y lloraba en silencio sentada sobre unas redes viejas que no tenían principio ni fin. «¡Qué cuadro!, ¿eh?». También miraba al mar, pero con gafas. De aumento y de recuerdo. «Yo los conocía a todos», empezó a contar. «En realidad, esto es un lugar pequeño y todos nos conocemos, pero el patrón del ‘Nuevo Pilín’ era mi vecino. Su cuñado era de Castro y justo vino a pescar con él. Mira lo que le ha pasado. ¡Qué desgracia!».

Carmen tiene los años suficientes como para saber que dedicarse a surcar las aguas no es un oficio para cualquiera. «Aquí son todos pescadores, no hay otra cosa para hacer», reflexionaba. "Y este mar nos da mucho, pero a veces nos quita más». Ahora pensaba en voz alta. «Sólo espero que puedan traerlos a todos de regreso. Hace muchos años, justo cuando comenzó la guerra, un tío mío se ahogó en un naufragio. Nunca volvió y eso es algo que no se quita de adentro». Se refería a la noche del 8 de julio de 1936, cuando el ‘Pósito I’ se fue a pique con sus dieciséis tripulantes.
En tierra firme
El equipo de salvamento de Alicante y la Guardia Civil han rescatado el cuerpo de Elías. La noticia recorrió el lugar provocando una oleada de alivio y una punzada de dolor. Sensaciones encontradas. Las embarcaciones llegaron al puerto a la una y media de la tarde y todos los santoñeses se volcaron a mirar. Otra vez protagonista, el silencio inundó el muelle dejándolo impávido, quieto. Muerto. Nadie se atrevió a pronunciar una palabra. A lo sumo, algún susurro de congoja se dejó sentir. Pero nada más. Desde lo alto de la cofradía, los familiares observaban todo. La pérdida del patrón, el padre, el esposo, era un hecho que no ofrecía posibilidad de réplica.

Los ojos de Santoña tenían más sal que su mar. «Esta tarde la capilla no va a dar abasto», vaticinaba Carmen. Y tenía razón. José Luis Fernández Santamaría, José Legaz Villajos, Agustín Fidel Escalante, José Ramón Pérez y Elías José Gallego. A todos ellos, el viernes, la mar se los tragó. A algunos, ayer, los abrazó la tierra. Sin embargo, el dolor no se hundió en el sentir del pueblo. A pesar de ser profundo. Y a pesar de calar hondo.

20.11.04

Más de 4.000 personas se citarán en Bilbao en el mayor congreso celebrado en Vizcaya

El Euskalduna recibirá a médicos y profesionales que «desbordarán todos los hoteles» el año próximo

Un nuevo reto se presenta ante Bilbao. El Palacio Euskalduna será la sede del mayor congreso en la historia de Vizcaya y la ciudad, como anfitriona, tendrá su prueba de fuego: acoger a 4.500 personas durante cuatro días consecutivos. La cita es un hecho. Entre el 5 y el 8 de octubre de 2005 se celebrará el XXVII congreso de la Sociedad Española de Medicina Rural y Generalista (SEMERGEN), uno de los más multitudinarios que se convocan en toda España. A lo largo de esas jornadas, la infraestructura de Bilbao estará exigida al límite.

El desafío es evidente. Hoteles, restaurantes y museos tendrán que hacerle frente a miles de personas a la vez. Según el director general del Palacio Euskalduna, Jon Ortuzar, el evento «marcará un hito» en la historia de la ciudad. «Es el mayor congreso de Vizcaya y, tal como va el ritmo, probablemente sea el más grande del País Vasco», indicó. Precisamente por ello, las gestiones ya están en marcha.

El alojamiento es el tema que más preocupa a los gestores del encuentro. Las previsiones señalan
que se necesitarán, como mínimo, 3.500 habitaciones para esas fechas y esto supone un problema. Por un lado, Bilbao no dispone de tantas habitaciones en establecimientos de cuatro y cinco estrellas. Por otro, «la agrupación de hoteleros sólo ha confirmado la reserva de un 60% del total».

Así lo explicó el jefe del equipo organizador de El Corte Inglés Viajes, Miguel Ángel Gómez, quien agregó que «los hoteles no están colaborando tanto como podrían. Sostienen que no desatenderán a sus clientes habituales, pero deben entender que un evento de estas características es algo excepcional». El responsable de la organización señaló, además, que durante esos cuatro días «todos los hoteles vizcaínos estarán bloqueados» y que el impacto trascenderá las fronteras, alcanzando a las provincias limítrofes: «Haremos reservas en Vitoria, San Sebastián y Santander», anunció Gómez.

«Reto extraordinario»
Para el Palacio Euskalduna, el congreso de SEMERGEN implica «un reto extraordinario», porque todas las instalaciones estarán dedicadas a albergar a los congresistas. Según adelantó su director, la ceremonia de inauguración «contará con más de tres mil invitados» y, durante el desarrollo del evento, «habrá veinte salas funcionando simultáneamente».

Sesenta laboratorios instalarán sus stands en el palacio para ofrecer material informativo a los congresistas quienes, a su vez, comerán en el recinto. «Los almuerzos de trabajo constituyen uno de los principales desafíos porque deberemos atender las necesidades de dos mil personas cada día. Eso requiere que seamos muy eficaces con la logística», manifestó Ortuzar.

Se estima que la cena de clausura congregará a cuatro mil comensales. Hasta ahora, el evento más numeroso llevado a cabo en el Palacio Euskalduna fue el Congreso de Psiquiatría que se celebró el mes pasado y registró 2.500 asistentes. Días antes se había registrado otro récord, cuando 2.300 italianos de una multinacional desembarcaron en la capital vizcaína . Estas cifras,
sin embargo, se duplicarán en menos de un año.

Los organizadores animan a la ciudad a que se "ponga las pilas"

«Esto va a ser una invasión de médicos». Con esa contundencia, el presidente de SERMEGEN, Julio Zarco, definió el alcance del congreso. En octubre del año próximo, miles de asistentes convertirán a Bilbao en un gigantesco hospital, tal como sucedió en Granada, donde se celebró el anterior encuentro.

En base a aquella experiencia, los organizadores se aventuran a hacer algunos pronósticos. «No habrá forma de comer ni de cenar en un restaurante sin hacer una reserva previa», asegura Miguel Ángel Gómez. En el congreso de Granada se manejaron más de quinientas toneladas de papel y folletos. Durante dos días enteros, fueron necesarias cincuenta azafatas para preparar los maletines que se entregarían a los médicos quienes consumieron, en las áreas de descanso, una media de diez jamones al día. Estos datos curiosos sirven para ilustrar la magnitud de un evento que, en su próxima edición, se celebrará bajo el lema ‘Nuevos Cauces’.

Precisamente, nuevos cauces son los que deberá idear Bilbao para recibir a este caudal de profesionales que desbordarán los hoteles y dispararán el consumo. «Animamos a que la ciudad se ponga las pilas para demostrar que puede entrar en esa liga de grandes receptores de eventos», dijo el director del Palacio Euskalduna.

Una sede «ideal»
Por su parte, Julio Zarco destacó que los miembros del País Vasco «llevaban muchos años trabajando la candidatura para ser sede» y que Bilbao es «el lugar ideal» para acoger el próximo evento. «Euskadi tiene un modelo sanitario muy interesante. Por esa razón elegimos este sitio para debatir la atención primaria de toda España», adelantó.

En el congreso venidero, los ejes temáticos serán, entre otros, la comunicación como herramienta
de trabajo, la obesidad, el uso de las nuevas tecnologías y la carrera profesional. El presidente
del comité organizador, José Luis Cañada, destacó que será un congreso «eminentemente científico», pues «cuanta más ciencia, mejor», pero que eso no impedirá que sea «ameno, divertido y cultural».

Una inyección de cinco millones y medio de euros

El congreso de SEMERGEN supone un impacto social para Bilbao, que deberá acoger en su seno a 4.500 personas de golpe. Del mismo modo, esta visita masiva representa un beneficio económico. «En esos días se moverá muchísimo dinero», asegura el jefe del equipo organizador, Miguel Ángel Gómez.

«Muchísimo dinero» significa, en este caso, 5 millones y medio de euros. La consultora internacional K Consulting –antes KPMG– estima que la celebración del evento dejará un saldo
favorable de 5.430.000 euros en la ciudad. Esta suma se compone de los gastos que realizarán los asistentes en hoteles, restaurantes y tiendas, así como de los gastos del propio Palacio Euskalduna y las empresas vascas que se adhieran a la celebración del congreso.

«Gran parte de los asistentes comerán en restaurantes. Sólo en relación a la comida, calculamos que gastarán unos cien mil euros diarios», señala Gómez. Sin contar los costes de los billetes de avión, la media de gasto, por persona y por día, será de 301,69 euros. Esto significa que se generará para Euskadi un PIB de 7.246.000 euros.

1.11.04

Los sindicatos reclaman un "carné profesional" para un millón de conductores

«Es una herramienta de trabajo en el caso de los transportistas», advierten. Taxistas y UGT anuncian movilizaciones si el Gobierno no recoge sus exigencias



Desde los «retoques» hasta un «cambio sustancial en algunos postulados», la modificación de la Ley de Tráfico y el nuevo carné de conducir por puntos han arrancado con reveses que demuestran, pese al interés por el consenso del Ministerio del Interior, que no todos los sectores implicados en la carretera están de acuerdo con la caja de cambios que propone el Gobierno. En realidad, el mejor acuerdo entre los agentes sociales, profesionales y la Administración radica en la propia filosofía de la reforma: evitar que España continúe en los puestos de cabeza europeos en cuanto a tasas de siniestralidad viaria. Sólo en 2003 se registraron 100.000 accidentes de tráfico, en los que murieron 5.399 personas y más de 150.000 resultaron heridas.

Además, según datos del Instituto Nacional de Toxicología, 635 de los conductores fallecidos presentaban alcohol en la sangre y, de ellos, 459 superaban el nivel máximo permitido. Por si fuera poco, los errores al volante constituyen una de las principales causas de mortalidad en los jóvenes de entre 18 y 24 años. Un panorama demasiado desolador como para no ponerle freno.

La mitad de accidentes
Precisamente, la nueva legislación viaria llegará después de un endurecimiento progresivo de las anteriores normativas y de un buen número de campañas de sensibilización que apelan a la prudencia. Tales referencias no han sido obviadas por el ministerio y la Dirección General de Tráfico al justificar un anteproyecto de ley que, cuando entre en vigor, pondrá en marcha una penalización mucho más severa.

El objetivo es «reducir el número de accidentes en un 40% dentro de los próximos cinco años», indican fuentes de Interior. Y para ello, se ha decidido implantar el carné por puntos como «una de las mejores herramientas destinadas a disminuir la accidentalidad y la reincidencia».

Para el Consejo de Ministros –que aprobó el anteproyecto el 15 de octubre–, la futura legislación supone un avance y deriva «de numerosos estudios comparativos» que reflejan los buenos resultados obtenidos en otros países de Europa, donde la mortalidad ha descendido entre un 20% y un 25%. España asimila de forma sustancial el modelo francés, uno de los más eficaces por su capacidad disuasoria –unas 100.000 licencias han sido suspendidas en doce años–, aunque algunos expertos consideren más pedagógico al alemán.

Los sindicatos y los conductores profesionales sostienen que la intención del ministerio «podrá ser buena», pero «todavía tiene muchas cosas para corregir». Los trabajadores reclaman la creación de un carné profesional, aunque la DGT dice que «no». Su director general, Pere Navarro, anunció el viernes que el Gobierno está «abierto a arbitrar fórmulas» que beneficien a los transportistas, pero descartó darles más puntos.

Al tira y afloja de la Administración con los profesionales del volante se añade una curva: el disgusto de las autoescuelas que, por un lado, defienden su derecho a impartir los cursos de rehabilitación y, por otro, desmienten que esas clases sean «el negocio del siglo».

SINDICATOS
«El anteproyecto está incompleto»

La Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CC OO) coinciden en que el texto del anteproyecto está «incompleto», debido a que «no contempla la situación del trabajador». «Tiene que haber una diferenciación entre los conductores comunes y los que trabajan en el sector. Por eso debe crearse un carné profesional en el que las sanciones no se acumulen», reclama la Federación Estatal de Transportes de la UGT.

Su portavoz, Abel Gómez, asegura que el sindicato «entiende el espíritu de las nuevas normas» y
cree que serán «positivas para reducir la siniestralidad». Sin embargo, añade: «Si el proyecto no
cambia, haremos las movilizaciones que sean necesarias para que se contemple la situación de un
millón de personas», el número de transportistas «que no ha sido considerado al elaborar este plan».

UGT presentó el lunes sus alegaciones ante el Ministerio del Interior y la Dirección General de Tráfico. Afirma «con rotundidad» que está «en contra del contenido del anteproyecto» y la razón principal estriba en que, para un profesional de la carretera, «su herramienta de trabajo es el carné». Retirárselo «podría estar transgrediendo un derecho fundamental, como es el derecho al trabajo».

Por su parte, Comisiones Obreras considera «positivo» el establecimiento del carné por puntos, pero reclama «otras medidas complementarias», como «un régimen especial» para los transportistas, taxistas y chóferes de autobús. A juicio de CC OO, es preciso el establecimiento de «un registro de conductores profesionales» en función de las cotizaciones a la Seguridad Social, y advierte de que «no se haga recaer la culpabilidad en el comportamiento de este gremio».

TAXISTAS
«Nos quitan el trabajo, no la licencia»

Para el presidente de la Asociación de Taxis de Bilbao, Ángel Hierro, el nuevo reglamento «intenta solucionar un problema pero en ese camino se lleva por delante a un montón de personas». Ahora mismo, avisa, la Confederación Española del Taxi es la encargada de negociar y todos los afiliados «estamos esperando que nos den las directrices para saber si nos movilizaremos o no».

La central matiza que, con la nueva ley, «no nos quitan el carné, sino el trabajo» y que «sólo nos consideran profesionales cuando les conviene». «Para las aseguradoras sí lo somos, cada vez que pagamos la póliza anual. Sin embargo, con este carné se nos trata como conductores anónimos. Sería bueno que se pusieran de acuerdo porque nos pegan por todos lados», lamenta.

Ante las posibles alternativas, Hierro no tiene claro si la implantación de «dos carnés diferenciados será la solución». No obstante, se pregunta qué sucederá «si en algún momento pillamos a un agente de tráfico que tiene un mal día. Igual nos quedamos sin trabajo».

AUTOESCUELAS
«Aquí no hay negocios fabulosos»

Las autoescuelas de España tienen su batalla particular en los cursos de sensibilización y recuperación de puntos. Frente a quienes opinan que debe diferenciarse entre aprendizaje y reciclaje, el presidente de la Confederación de Autoescuelas, José Miguel Báez, subraya que «lo lógico es que nos encarguemos de ellos, pues es nuestra profesión y tenemos la infraestructura necesaria».

«Estamos a favor de la reforma. Es más, veníamos pidiéndola desde 1989», explica Báez quien asegura, a su vez, haberle dicho «algunas cositas» al Gobierno, entre ellas que «el tema de los puntos debería recibir algunos retoques». Tanto Báez como Íñigo Montenegro, presidente del gremio en Euskadi, están «dolidos» por «la forma en que se ha especulado con un negocio fabuloso que, en realidad, no existe», a raíz de que empezarán a circular las cifras que sitúan el coste global del carné en 14 millones de euros. Montenegro sostiene que impartir los cursos «es un asunto de prestigio, no de recaudación económica. Es triste que se deformen las cosas». El colectivo recuerda que dispone de 6.000 centros en el país. «Que el Gobierno sepa que estamos».

La "lógica" del seguro de asistencia legal
Para las aseguradoras, la implementación de la nueva normativa supone un cambio sustancial en el tráfico y la seguridad vial al cual no se sustraerá el sector. Sin embargo, y a pesar de reconocer
que las modificaciones «nos afectan», el diseño de «la mejor política a seguir aún está en estudio», admite la Fundación Mapfre.

La Asociación Nacional de Seguros (UNESPA) también avanza con cautela. «Todavía no sabemos
cómo repercutirá el sistema de los puntos en las compañías», dice el portavoz, Miguel Ángel Vázquez. «Por lógica, debería crecer la demanda del seguro de asistencia legal y del subsidio en caso de retirada del carné», puntualiza, dos modalidades que están en el mercado desde hace tiempo.

Según UNESPA, ambas pólizas son solicitadas especialmente por los profesionales del volante. «Su perspectiva es diferente con respecto al nuevo método, ya que, si les quitan el carné, les dejan sin sus fuentes de ingreso», reflexiona Vázquez. Por esa razón, suelen resguardarse contratando una póliza «que compense «esa entrada de dinero».

La asociación recuerda, en cualquier caso, que siempre ha existido la posibilidad de perder la licencia. La diferencia es que, ahora, «ya no es necesario ser un kamikaze al volante» para que eso ocurra. «La acumulación de pequeñas faltas puede derivar en el mismo resultado».
–¿Habrá un descenso de seguros si baja la siniestralidad?
–No lo sabemos, pero siempre habrá uno que será obligatorio.